Depresión
¿POR QUÉ NOS DEPRIMIMOS?
La depresión se
puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido
o derrumbado. La mayoría de nosotros se siente de esta manera alguna que otra
vez durante períodos cortos.
La depresión
clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de
tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante un
período de tiempo prolongado.
Cuando nos
deprimimos es porque han ocurrido cambios en el ambiente que nos rodea que se
perciben como desagradables. Es lo que los psicólogos llamamos “pérdida de
reforzadores”.
1. La persona
sufre un cambio de vida que le
afecta negativamente, como la pérdida de un ser querido. Que aparezca depresión
o no dependerá del valor subjetivo que se le otorgue a la pérdida.
2. Por una ruptura de cadenas conductuales, que es
una forma particular de perder reforzadores, también puede aparecer la
depresión. Esto ocurre cuando se producen cambios ambientales como trasladarse
de ciudad, cambios laborales, ascensos, cambio de barrio o de casa... El que
disfrutemos de una actividad no solo tiene que ver con ella, sino con unos
pasos previos o posteriores a la actividad que son los que nos producen
satisfacción. Los cambios positivos llevan aparejadas importantes rupturas en
las cadenas conductuales, que pueden provocar depresión.
3. Si aumenta en cantidad o calidad la aversión a la que una persona se ve
sometida, como tener trabajo desbordado, estudiar contrarreloj, tener a un familiar no grato un tiempo en
casa..., también puede surgir la depresión. Hay un aumento de lo negativo que
va contaminando y quitando valor a lo positivo.
4. Debido a una pérdida de reforzadores simbólicos
también surge la depresión. Dejar de creer en valores filosóficos o morales,
valores que le han arropado durante toda su vida e incluso que le han servido
de guía y directriz, así la persona se quedaría sola y perdida.
La persona se ve privada de algo que considera importante, y aparece un
período normal de tristeza, pero si no sabe afrontar esta situación con
eficacia, empieza a sentir cambios emocionales, cognitivos y conductuales, y
empieza a deprimirse.
Estos cambios hacen que el S.N.C sufra modificaciones, haciendo que el
cerebro segregue menos neurotransmisores (que son los que contribuyen a la
regulación del estado emocional, y esto ayudaría a que la depresión se asiente.
Los síntomas de
la depresión abarcan:
·
Estado de ánimo irritable o bajo la mayoría de las veces.
·
Pérdida de placer en actividades habituales.
·
Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño.
·
Cambio grande en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso.
·
Cansancio y falta de energía.
·
Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa.
·
Dificultad para concentrarse.
·
Movimientos lentos o rápidos.
·
Inactividad y retraimiento de las actividades usuales.
·
Sentimientos de desesperanza y abandono.
·
Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio.
Los tipos
principales de depresión abarcan:
·
Depresión mayor: deben presentarse 5 o más
síntomas de la lista de arriba, durante al menos dos semanas para diagnosticar
este tipo de depresión. La depresión mayor tiende a continuar durante al menos
6 meses si no recibe tratamiento. (Se dice que usted tiene depresión menor si
presentan menos de 5 de estos síntomas durante al menos 2 semanas. La
depresión menor es similar a la depresión mayor o grave, excepto que la primera
sólo tiene de 2 a 4 síntomas).
·
Depresión atípica: ocurre en aproximadamente un
tercio de los pacientes con depresión. Los síntomas abarcan comer y dormir en
exceso. Usted puede sentirse como si estuviera sobrecargado y se acongoja mucho
por el rechazo.
·
Distimia: una forma de depresión más leve
que dura años si no recibe tratamiento.
Otras formas
comunes de depresión abarcan:
·
Depresión posparto: muchas mujeres se
sienten algo deprimidas después de tener un bebé, pero la verdadera depresión
posparto es más intensa e incluye los síntomas de la depresión mayor.
·
Trastorno disfórico premenstrual (TDP):
síntomas depresivos que ocurren una semana antes de la menstruación y
desaparecen después de menstruar.
·
Trastorno afectivo estacional (TAE): ocurre
con mayor frecuencia durante las estaciones de otoño e invierno y desaparece
durante la primavera y el verano, muy probablemente debido a la falta de luz
solar.
VARIABLES QUE PREDISPONEN A LA GENTE HACIA LA DEPRESION:
Þ
Estilo de vida: las personas
que realizan más actividades agradables son personas menos predispuestas hacia
la depresión. A mayor área de satisfacción, menos facilidad para la depresión.
Las personas con vidas llenas suelen tener una actitud más optimista y
positiva.
Þ
Estilo
cognitivo: la forma de pensar. A lo largo de nuestra educación, desde la infancia,
vamos aprendiendo esquemas o creencias con las que organizamos nuestra vida. Si
el contenido de esas creencias es inadecuado, favorecerá la aparición de la
depresión, tras una pérdida de reforzadores.
»
Uno mismo no es
lo suficiente valioso: las personas
con baja autoestima están continuamente al borde de la depresión. Se consideran
inferiores a los demás, evalúan selectivamente su comportamiento, focalizan sus
errores y pasan por alto sus aciertos. Se comparan continuamente con los demás,
lo que provoca miedos sociales y ansiedad. Como no se gustan a ellos mismos piensan
que no van a gustar a los demás y que los demás van a pensar cosas negativas de
ellos. Esta creencia se aprendió a través de padres que utilizaban expresiones
desvalorizantes hacia sus hijos, o por medio de sistemas educativos muy
moralistas y rígidos, comparaciones frecuentes con hermanos, humillaciones
personales, excesivas humildad...
»
Filosofía de la
culpa: Si uno comete
un error debería recibir un castigo severo. Este castigo suele ser administrado
por uno mismo en forma de terribles remordimientos y sentimientos de culpa.
Ante un error es saludable sentirse incómodo y preocupado si nos sirve para
pensar cómo podríamos actuar la próxima vez. La culpa implica que a partir de
un error nos desvalorizamos como seres humanos y creemos que para “redimirnos”
necesitamos ser castigados. La culpa suele ir unida a un excesivo
perfeccionismo, a una exigencia de metas muy altas, frecuentemente
inalcanzables, y cuando no lo consiguen aparece la culpa.
»
El mundo
debería ser un lugar
maravilloso donde vivir: donde no hubieran problemas, ni contratiempos, ni
desgracias. Pero desafortunadamente el mundo no es así.
Þ
Deficiencias en
el área social: se refiere a alguna dificultad en el conjunto de habilidades que
necesitamos para relacionarnos eficazmente con los demás, como saber iniciar
conversaciones, saber hacer peticiones o saber recibir una crítica. Estas
habilidades se aprenden a lo largo de la educación. Si el aprendizaje es
incorrecto hay una tendencia a la depresión. Si la persona no se siente
arropada en un entorno social, también se sentirá deprimida cuando surja un
problema.
Þ
Habilidad para
resolver problemas: las pérdidas de reforzadores son problemas, cambios, que la persona tiene
que afrontar resolver. Si una persona no
sabe un procedimiento específico y estructurado para evaluar lo que está
sucediendo, buscar alternativas y tomar la decisión más adecuada para sus
circunstancias, esto le generará problemas psicológicos que culminarán en la
depresión.
Þ
Vulnerabilidad
biológica: la facilidad para reducir la segregación de neurotransmisores una vez
iniciado el proceso de depresión.
¿POR QUÉ SEGUIMOS DEPRIMIDOS?
-Pérdida de reforzadores críticos para su vida
-Impacto psicológico: dolor emocional
Pensamientos negativos (no voy a poder..., es por mi culpa..., soy un
desastre...)
Sensaciones emocionales y físicas (llanto, apatía, problemas con el
sueño...)
-Inercia: se dejan de hacer actividades porque no nos apetece hacer cosas.
Voluntarias
Obligatorias
Privarnos de las actividades placenteras que necesitamos para sentirnos
bien, es más pérdida que se suma a la pérdida de reforzadores inicial, lo que
provoca más dolor emocional y más inercia.
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